jueves, 30 de agosto de 2007

un cuento por Aldana de 6 D


Dinora, una mujer apuesta, decidida, con metas en su vida, era actriz de un teatro ubicado en el partido de san Isidro. Participaba de una comedia llamada "hoy estamos de fiesta".Hace cinco años que ella vivía sola |en un departamento de Olivos, y había perdido contacto con su padre que vivía en su tierra natal, Entre Ríos.
Un día, luego de unas mañana muy ocupada y de mucho trabajo, volvió a su casa.Cuando ella habría la puerta encontró una carta muy rara en el piso, la tomo y se sentó en el sillón porque presentía que iba a ser algo malo, y así fue.
Nunca imagino una noticia como esta, su padre había sido asesinado, un desconcierto paso por su mente y un escalofrío por su cuerpo.
La carta había sido enviada por el mejor amigo de su padre, el señor Alvarez.
En ella contaba que el asesino de su padre era supuestamente el abogado Potilinsky, el cual siempre envidió la riqueza de su padre. Todas estas suposiciones fueros sacadas por el señor Alvarez y por esa razón Dinora contrato un detective.
Aunque ella no tenia mucha relación con su padre sintió muy de cerca so muerte. Prometio hacer algo para vengarla.
Ella viaja hasta la casa de su padre con el detective y allí comenzó la investigación.
Fueron ciertas las suposiciones del señor Alvarez su padre fue asesinado con el arma del abogado Potilinsky que se encontraba, en el cajón de su despacho.Al terminar con la investigación, Dinora; fue a la casa del abogado.
Potilinsky se sorprendió mucho al verla y la invitó a pasar a su casa. Dinora lo comenzó a interrogar y el se puso muy nervioso, entonces se fue a buscar algo para beber, mientras tanto ella aprovecho para buscar el arma en el cajón.
Cuando Potilinsky volvió ella ya se encontraba en el living con el arma en su cartera.
Dinora, siguió con su interrogatorio e hizo poner más nervioso al abogado, al verse presionado con todas esas preguntas pidió permiso para ir a su despacho a buscar algo, Dinora largo una carcajada siniestra y el abogado miró con desconcierto al ver que Dinora lo apuntaba con "su arma". Ella disparó sin compasión y le pegó en el pecho y murió en el acto.
Al terminar con su venganza, Dinora llamó a la policía y contó lo sucedido pero contó una mentira. Dijo que el abogado Potilinsky había querido abusar de ella y que actúo en defensa propia. Dinora no fue culpada de este asesinato y pudo vengar la muerte de su padre.

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